Todo preparado y listo para el encuentro de vuelta de los cuartos de final de la Liga Campeones que se celebrará mañana en el Quijote Arena a partir de las 17,00 horas, con arbitraje de los checos Vaclav Horacek y Jiri Novotny.
Un partido que dejaron los de Talant descafeinado en la ida al imponerse en tierras alemanas de SG Flensburg-Handewitt por 24-38, pero que mantiene el interés de ver siempre un encuentro de Champions, ante un león herido y donde los de Ljubomir Vranjes querrán resarcirse con un buen partido y dar la sorpresa. Además tiene como condicionante, salvo sorpresa de última hora, que el Renovalia Ciudad Real tendrá que jugar con su equipo al completo ya que los juveniles están celebrando su fase de sector del Campeonato de España y no podrán estar. Una lástima ya que es una ocasión única para que se rodasen y cogieran minutos.
Según recoge Arnulfo Beckmann en la web del Flensburg, no es una misión muy divertida para los alemanes, reconocido por el entrenador Vranjes, “tenemos casi todo perdido desde el primer partido. Todo lo que se había planeado, no se aplicó”, resaltando Ljubomir que Ciudad Real lo gana todo en su casa: “Ciertamente no es fácil en una situación así motivar a un equipo. Pero por otra parte, son todos profesionales. Está claro que el estado de ánimo es muy diferente al partido de ida ya que saben que no hay ninguna posibilidad el ganar por 15”, ante lo que se plantea “ cambiar a los jugadores con frecuencia, que disfruten y repartir minutos para así que no pierdan mucha fuerza. Nuestro futuro es de nuevo Friesenheim el próximo martes”.
Pese a la derrota tal abultada, y casi eliminación del Flensburg en Champions, para su entrenador la temporada es bastante decente, “eso creo yo. Ha habido dos partidos que me dejaron triste, en casa ante el Ciudad Real y la salida a Rhein-Neckar Löwen. De lo contrario, siempre hemos jugado bien”, comentó Vranjes, que todavía no sabe si seguirá la próxima temporada como entrenador del SG Flensburg.
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