Los hombres de Maximov son en este momento la referencia del balonmano ruso desde hace una década, muestra de ello es la conquista de las últimas 9 Superligas Rusas. Además, el combinado nacional está formado por gran parte de la plantilla de "Los Osos".
El Chejov ha sabido transformar en ventaja lo que para muchos conjuntos sería un problema. Se trata de una plantilla que no ha realizado grandes fichajes, desde años atrás ha mantenido el mismo bloque de jugadores. Es el caso de Grams, un seguro en la portería rusa o Filippov, fundamental en la dirección del juego, con gran proyección ofensiva y continuos desdoblamientos hacia la zona de 6 metros.
Otro de los jugadores destacados es el corpulento pivote Mikhail Chipurin, sabe leer perfectamente los movimientos de sus compañeros y sus bloqueos son aprovechados por la primera línea rusa. Estos jugadores ya formaban parte del equipo hace dos temporadas, cuando cayeron derrotados en la Final Four por el FC Barcelona.
Pero no todos ellos son veteranos dentro del equipo, el bielorruso Shiarei Harbok, lateral izquierdo de 28 años procedente del Rhein Neckar Lowen, fichó la pasada temporada por el conjunto de Maximov. El lateral cuajó un gran encuentro en su visita a Vistalegre, gracias a su potente lanzamiento desde la larga distancia.
Su juego no sólo está basado en el aspecto ofensivo, también debemos destacar el rigor defensivo y la dureza de su juego. Muestra de ello, fue la final disputada del Torneo de Desseau y el precedente en competición europea esta misma temporada, donde el Balonmano Atlético de Madrid no pudo doblegar a los rusos. Este será un conjunto a tener muy en cuenta, uno de los máximos favoritos para acceder a la Final Four de Colonia.
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