El balonmano asturiano vivió ayer su fiesta en una nueva edición de su gala celebrada en el auditorio de la Casa de Cultura de Avilés, donde fueron reconocidos jugadores, equipos, técnicos, árbitros y directivos que han destacado durante la temporada o por su trayectoria. El presidente de la Federación Española, Juan de Dios Román, no quiso perderse la fiesta del balonmano de la región, que cada día cuenta con más representantes a nivel nacional e internacional, y acompañó al presidente de la Asturiana, Manuel de la Cámara, y otras personalidades políticas y deportivas.
La Federación Asturiana quiso reconocer con la insignia de oro la trayectoria de Javier Elósegui, presidente del Oviedo Femenino, que lleva 30 años luchando por el balonmano tras haberse dedicado al fútbol como jugador y entrenador. La distinción le fue entregada en una cena tras la gala, en la que también se concedieron insignias de plata a Miguel Ángel Álvarez (presidente de La Calzada), Luis Avelino Álvarez (entrenador del Gijón femenino juvenil), Pedro Maraña (técnico en el Corvera) y José Pablo del Hoyo (coordinador de deportes del Colegio Santo Ángel de Avilés), así como los premios a la trayectoria para Javier Díaz Llorente, presidente del Gijón Balonmano, y a la labor directiva, para Juan Gabriel de Álvaro, presidente del Medicentro Gijón, ascendido a División de Honor Plata.
Durante la gala recibieron su trofeo los equipos ganadores de los diferentes Campeonatos de Asturias y Torneos Federación y Principado.
Además, fueron reconocidos los mejores jugadores de la temporada en todas las categorías, así como los absolutos, que un año más fueron los internacionales Alberto Entrerríos, cuyo galardón recogió su padre, y Jéssica Alonso. También recibieron su trofeo quince jugadores que han participado con la selección española esta temporada, caso de Raúl Entrerríos y Rubén Garabaya.
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