Pajovic, la fuerza al servicio de un equipo

Se quedó son ficha, fue cedido al Kiel, pasó por el Europeo y es uno de los más en forma de Europa


El regreso de ‘Mazinger’ Pajovic le otorgó fuerza y sobriedad defensiva al BM Ciudad Real

“Como se vive en España no se vive en ningún sitio”


LUIS CAMPOS

El regreso del esloveno Ales Pajovic al BM Ciudad Real tras quedarse sin ficha al comienzo de la temporada, y ser cedido al Kiel alemán para que sólo pudiera jugar la Bundesliga mientras se recuperaba Karabatic, le ha dado un plus defensivo a los de Talant en esta segunda vuelta de Champions y Liga Asobal, enmendando de esta forma el error primitivo de no hacerle ficha federativa por dar entrada al extremo danés Christian Hjermind.
De su experiencia en Alemania, su retorno de nuevo a la selección de Eslovenia, y su inclusión en el equipo ciudadrealeño, habla para +Balonmano.
¿Entendió que le dejasen sin ficha?
“Es una decisión que no me competía a mí, sino a mi club, con el que tengo contrato hasta 2009 y yo estoy aquí para lo que quieran. La marcha de Dzomba nos dejó sin extremos y tenían comprometido a Hjermind y sobrepasábamos las fichas de no seleccionables y en principio me quede fuera del equipo”.
¿Del equipo y en una situación anormal?
“Pues sí, pero los compañeros me animaron mucho y estábamos pendientes de las nacionalizaciones de Sterbik y Rutenka para que pasasen a jugar como españoles y entonces yo tendría de nuevo ficha. Era un compás de espera, que se hace largo. Me entrenaba con ganas pero la verdad, es que era duro llegar los fines de semana y quedarte sin jugar”.
¿De ahí que aceptase, entre la cantidad de peticiones que existía, de ir cedido al Kiel?
“Fue una buena decisión. Necesita jugar para no perder ritmo de competición y se me abría la posibilidad de hacerlo en el Campeón de Alemania y Europa, y me decidí, eso sí, con fecha de 31 de diciembre y sin jugar en Champions para cuando regresara a mi eqyipo pudiera jugar en Europa”.
¿Su experiencia en Alemania con el Kiel, cómo fue?
“Muy positiva. La verdad es que me salieron bien las cosas y enseguida me adapte y empecé a aportar mi granito al equipo”
¿Se hizo largo la cesión y eso que fueron menos de tres meses?
“Sí, mi mujer y yo estábamos deseando regresar a España. No es que estuviésemos mal, pero es otro ambiente. Alemania y España en lo deportivo se dan la mano, es más o menos igual, con un alto nivel deportivo, pero en lo social no se pueden comparar. Como se vive en España no se vive en ningún sitio del mundo, ni las comidas”.
¿Y cuando ya sabía que volvería al BM Ciudad Real se compromete jugar con Eslovenia cuando llevaba tiempo renunciando a jugar con su país?
“Yo tuve un roce con el antiguo seleccionador y por eso renuncié. Ahora soy padre y no quería dejar a mi mujer e hijo solos en las vacaciones, pero me convenció Zorman, luego el seleccionador, hablaron con mi esposa y me autorizó a jugar”.
¿Y lo hizo bien?
“La verdad es que estuve en un alto nivel y yo personalmente regrese contento”.
¿Y cuado se habla de que el calendario agotó a los mejores jugadores de Europa, llega usted y está pletórico de fuerza y ganas?
“Comencé a jugar más tarde que mis compañeros, me vino muy bien estar en el Kiel, en el Europeo jugué mucho y sin ese alto grado de exigencia, y ahora me encuentro bien y con ganas de aportar a mi equipo, y conseguir títulos con ellos, ya que me perdí los dos que llevan este año”.
Para finalizar ¿choca que en su equipo actúe sólo en defensa cuando con el Kiel y Eslovenia lo hizo bien en el ataque?
“Yo estoy aquí para jugar y donde me diga el entrenador, yo estoy contento y feliz con mi papel en el BM Ciudad Real”, pues que siga la felicidad y la transforme en títulos que es lo que engrandece a un jugador y su club.