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Presidente del San Antonio |
Vicente informó a los socios presentes en la asamblea -26 de un total de 55 con derecho a voto- sobre la actual situación de la entidad, cuya deuda asciende a 1,3 millones de euros, así como las razones que les llevaron el pasado mes de julio a renunciar a jugar la próxima campaña en la máxima categoría del balonmano nacional: "Ha sido muy duro y estamos todos muy jodidos. Creo que un club como éste, con 57 años de historia y su palmarés, merecía algo más. Nosotros nos hemos implicado hasta la médula y lo hemos intentado todo, pero cuando ves que no se puede hacer nada más te sientes frustrado y la sensación que te queda es de bastante fracaso", ha reconocido el mandatario albiazul.
Una vez que se haga efectiva la petición en el Juzgado, serán uno o varios administradores designados por el juez quienes estudiarán la cuentas del club y harán un informe concursal, a partir del cual se determinará si el San Antonio puede seguir adelante o no con la gestión de la entidad para conseguir que el mayor número de acreedores que mantiene cobren el máximo posible de lo adeudado: "Cuando uno se pone en manos de un administrador judicial puede pasar cualquier cosa. Ellos tratarán de garantizar la continuidad del proyecto a no ser que vean que es absolutamente inviable. Mientras el administrador no diga lo contrario, nuestra intención es seguir con la gestión deportiva", ha sentenciado Vicente.
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