Tras la derrota frente al Bidasoa del primer encuentro de preparación (24-23), los de Aitor Etxaburu saltaron a la pista dispuestos a no sufrir una nueva derrota. Así, a pesar de las bajas de Rolandas Bernatonis, de Matías Schulz (que descansó) y, por distintas molestias, de Pocholo, Carvajal, Paco López, Jon Latorre y, tras dañarse en el calentamiento, Maxi Cancio, la diferencia de juego de uno y otro equipo se hizo evidente desde el primer momento.
Eso propició las pruebas del conjunto pamplonés, así como la participación de jugadores del filial como Etxeberria o Julen.
Hoy, a partir de las 19,00 horas y en Oñati, el conjunto verdiblanco se va a enfrentar al Huesca, otro de los equipos que ascendió la pasada temporada a la máxima categoría del balonmano nacional.
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