
Ortega tenía previsto ejercer la temporada recién finalizada como segundo entrenador, pero las diferentes lesiones le llevaron a volver a jugar en su último año en la competición que definió como "muy duro" para él, "además porque no se han conseguido los objetivos".
El nuevo técnico naranja deberá comenzar a trabajar con una plantilla que será nueva en un cincuenta por ciento, y expresó su filosofía de juego en la que piensa trabajar con más variantes defensivas que el habitual 6-0 de las temporadas anteriores.
El presidente del club zaragozano, Domingo Aguerri, manifestó que la campaña recién finalizada les ha dejado "un sabor agridulce" en la que han tenido "mala suerte, sobre todo en las lesiones que han marcado la situación en la clasificación".
Aunque son conscientes de que tienen muy complicado volver por cuarta temporada consecutiva a una competición europea, expresó su confianza en que tanto BM Ciudad Real como Pevafersa Valladolid conquisten la Liga de Campeones y la Recopa, respectivamente, haciendo "el trabajo que no hemos hecho por nuestra cuenta", y finalmente la Federación Europea de Balonmano (EHF) termine invitando a otro equipo español a sus competiciones.
Aguerri anticipó que la nueva temporada la afrontarán con una plantilla más reducida con "catorce jugadores, dos por puesto, más un pivote", para lo que ya cuentan con los fichajes cerrados de Iñaki Malumbres y Gabor Grebenar, y están "pendientes de la firma" para cerrar las incorporaciones de Frederik Larsson y Vukasin Stojanovic, y todavía deberán cerrar la llegada de dos laterales, uno para cada lado.
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