El extremo derecho madrileño, Roberto García Parrondo, ya no jugará más en España. Tras seis temporadas en el equipo del BM Ciudad Real/Atlético de Madrid, ha decidido continuar su carrera en Hungría, en el Pick Szeged, de Juan Carlos Pastor, donde ha firmado para los próximos tres años.
En una entrevista en la página web del club se despide de la afición a la que quiere agradecerle todo "el apoyo y muestras de cariño".
Eres uno de los jugadores veteranos en el equipo, ¿Qué balance haces de estos 6 años?
"He estado 4 años con el BM Ciudad Real y 2 como BM Atlético de Madrid. Unos años en las que el balance no puede ser de otra manera más que maravilloso. A nivel deportivo, hemos conseguido todo lo que un deportista puede desear. He ganado la Champions League, la Liga, Copa del Rey, Mundial de Clubs, etc. En mi primera temporada el equipo consiguió ganar todos los títulos en los que participaba. Un sueño. Sin embargo, me quedo con todo lo vivido a nivel personal. 6 años en los que he conocido a gente maravillosa. He hecho grandes amigos en Ciudad Real. Me he traído a Madrid el cariño y el recuerdo de mucha personas con las que he compartido el día a día de mi vida. Una ciudad donde nació mi segunda hija, y dónde empezó a crecer la mayor. Y qué decir del BM Atlético de Madrid. He vuelto a mi casa, donde nací, y dónde crecí. Toda mi familia y la de mi mujer. Todos los amigos de cuándo era pequeño. He vuelto al lugar de dónde salí. Aunque ha habido momentos malos, es imposible que hagan sombra a todas las buenas experiencias, sensaciones, y vivencias que por suerte he podido experimentar".
¿Qué momento recuerdas con más cariño y cuál ha sido el peor?
"Para mí es difícil elegir un sólo momento. De todos los títulos que he conseguido ganar con este club, guardo un gran recuerdo, un momento especial. Si tuviera que quedarme con uno, sería cuándo ganamos la Champions League en Kiel. Habíamos ganado todos los títulos, y llegamos a la final de la Copa de Europa. Perdimos el primer partido en casa, en Ciudad Real, y teníamos que ir a Kiel a remontar. Fuimos allí, y conseguimos levantar la Copa. La primera final que jugaba, con toda en contra, y en una pista de histórica como el campo del Kiel. Ahora me quedo con los últimos días, las dos últimas semanas en el BM Atlético de Madrid. El último partido en casa, y el último partido de Valladolid. La última semana de entrenamientos. Es cuándo recuerdas todos los momentos que has vivido. Y el momento más duro de todos... cuándo con el equipo no hemos conseguido los retos y objetivos que nos habíamos planteado. Es duro entrar en un vestuario con todos tus compañeros después de una derrota".
Este año finalizaba tu contrato y has elegido Hungría para continuar tu carrera, ¿Qué te ha hecho decidirte por el Szeged?
"A la hora de elegir dónde vas a jugar y vivir, tienes que tener en cuenta muchas cosas. Me he decidido por el Pick Szeged porque una vez estudiado todas las condiciones, me parecía la mejor opción tanto para mí como para mi familia. Un club del que me han hablado muy bien. Una ciudad dónde se vive el balonmano. Tengo unos sentimientos contradictorios. Estoy triste por abandonar mi ciudad. Y a la vez emocionado, por ir a vivir otro balonmano. A disfrutar de otra forma de vida. A conocer otro país. Un lugar dónde vivir con mi mujer y mis hijas".
Has jugado en los mejores Clubs de España, ¿qué destacarías de cada uno de ellos?
"Sólo puedo dar las gracias a todos estos equipos. Me han hecho como soy. Me han ayudado a mejorar como jugador y como persona. Soy como soy porque he estado en esas ciudades y en esos equipos. Muchas gracias a toda la gente que nos ha acogido en esas ciudades".
Por último, un mensaje para nuestra afición y a todos los amantes del balonmano español que te han seguido siempre?
"Estos días, he recibido muchos mensajes de apoyo, y dándome la gracias por mi esfuerzo y entrega en los partidos. A mí me gustaría devolverle esos mensajes y darles las gracias a todos ellos, por estar animándonos y ayudando al equipo. Uno no puede devolver todos esos gestos que recibe de los aficionados. Ojalá pudiera explicar con palabras lo que se siente al recibir esas voces, gritos y sentimientos de la afición cuándo te está apoyando. A todos los Atléticos, que sigan apoyando al equipo. El BM Atlético de Madrid se merece la ayuda de todos para que este club permanezca y siga estando entre los grandes. Mi mayor deseo es que el Club pueda conseguir una estabilidad durante los próximos años".
¡Gracias por todo Rober y mucha suerte!.
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